Hemos realizado un scamper sobre el cuento La Ratita Presumida.
¿ Qué es un Scamper?
Es una técnica que favorece la generación de ideas a partir del planteamiento de un mecanismo tan sencillo y tan potente en el ámbito educativo como la pregunta.
En cuanto técnica de creatividad, es un acrónimo formado por distintos verbos que, planteados en tono de pregunta, dan lugar a una lista a partir de la cual podemos emprender la realización de distintas acciones.
Substitute (sustituir)
Combine (combinar)
Adapt (adaptar)
Modify (modificar) - magnify (maximizar) o minimize (minimizar) -
Put the other use (dar otro uso)
Eliminate (eliminar)
Reverse o rearrange (reordenar)
Nuestra versión ha sido la siguiente.
LAS
RATITAS PRESUMIDAS
Érase una vez dos
ratitas presumidas que al quedar huérfanas, decidieron irse a vivir juntas, así
que alquilaron una preciosa casa.
Don ratón que era
su vecino, desde que llegaron las había
acogido como hijas suyas, actuando como un padre para ellas.
Una mañana estando
las dos barriendo la entrada de su casa, encontraron entre unas macetas un
billete de 50 euros.
¡Qué alegría!
Dijeron las dos con este dinero organizaremos un botellón.
Rápidamente
cogieron su móvil e invitaron a todos sus amigos.
Las dos ratitas fueron
a Mercadona y compraron todo lo necesario para la gran fiesta. Después se
fueron de compras pues como eran muy presumidas querían impresionar a todos sus amigos.
Entre los
invitados estaban el gallo, el gato, el pato, el cerdo, y los hermanos ratones.
El pato y el gato
estaban enamorados de las ratitas, y esa noche querían declararles su amor, y
pedirles matrimonio.
Pero no eran los
únicos, el gallo, el cerdo y el ratón también tenían el mismo propósito.
Llegada la noche,
la fiesta comenzó y todos los pretendientes de las ratitas esperaban su momento
para declararles su amor, de repente sonó una canción lenta, las ratitas se
vieron rodeadas de todos sus invitados.
Pero las dos
ratitas echaron un paso al frente y cada una de ellas eligió a su compañero de
baile. Estuvieron bailando toda la noche.
A la mañana
siguiente tocaron a la puerta de las ratitas, era don gato y don pato, sus
compañeros de baile y botellón. Con la gran sorpresa de que iban a pedirle la
mano a don ratón de las dos ratitas. Don
Ratón aceptó encantado, y las dos se casarían próximamente el mismo día y con
la misma celebración. La felicidad para don ratón era doble porque se casaban
sus dos hijas.
Así fue como las dos ratitas conocieron el
amor y por siempre serían felices.
